La semana pasada anduve un poco liado. Tenía los exámenes de inglés y tuve que estudiar, pero no me preguntéis el resultado porque no lo sé y porque el inglés y yo ... Y eso que solo lo quiero por reto personal. Después de tantos años con esa asignatura y tantos años escuchándolo por todas partes, me resulta vergonzoso ponerme a escuchar una canción o algo en inglés y no saber que dicen.
Mi dislexia, mi acento murciano, mi mal oído, mi poca entonación... todo puede ser un buen argumento que explique que no sea capaz de aprender el idioma, pero si estuviera viviendo allí, todo se convertiría en castillos de arena. No conozco a nadie que tras irse a vivir a un país de habla diferente al suyo, haya vuelto sin saber el idioma. Así pues, puede que el problema sea justamente ese, que no lo haya puesto en práctica y por eso no sea capaz de dar palo al agua.
De todas formas yo seguiré practicando y seguiré intentando aprenderlo, hasta que pueda tener el dinero suficiente para irme a estudiar un mesecico al extranjero que tal vez sea la forma de soltarme.
Una semana sin hablar da para varias entradas y diferentes temas que pueden pasar por mi cabeza, y os puedo asegurar que esta semana, el no escribir no ha sido por falta de temas. Durante varios días estuve dándole vueltas un poco a mi forma de ser, a mis aficiones, a mis gustos, a mis metas... Sé que de esto he hablado muchísimo en este blog, pero este viaje fue de forma diferente, porque creo que fui capaz de verme como soy sin más tapujos. A la vez encontré mi gran defecto, la vergüenza. Me avergüenzo de como soy, de lo que pienso, y con ello le doy más importancia a la opinión de la gente que a lo que yo mismo puedo pensar. Creemos que los juicios de los demás son mucho más importantes que nuestra propia opinión y a veces (la mayoría de ellas) preferimos callar a que se ría de lo que pensamos.
Parece una tontería pero muchas veces nuestros defectos se generan por esa sensación de vergüenza y de priorizar lo que piense la galería antes de lo que nosotros sentimos o simplemente pensamos...
Por otro lado, entre en el dilema de ... o yo soy un salido o el Ñajo está muy estresado o le estoy empezando a dejar de gustar... pero eso lo dejo para otro momento, no me gusta hablar de esas cosas... Eso sí, la primera la tengo muy clara, algo salidico soy, pero que le vamos a hacer... son las consecuencias de ser virgen hasta los 28... que se dice pronto jejejeje... (quitando hierro a algo que me preocupa bastante)
Y para terminar este popurrí un grato sueño que he tenido esta noche. Hoy, después de muchos años he vuelto a abrazar a mi abuela y a mi tía. Para mí ha sido una de esas sensaciones que me han dado la primera sonrisa de la mañana. Es el gran milagro que tienen los sueños, vives cosas que son imposibles y piensas que son realidad...
Y con esto dejo este popurrí que hubiera servido para cuatro entradas diferentes... pero he estado de exámenes y ... de bajones.
POR MI VENTANA: pájaros, pájaros y más pájaros....
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